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Todos los agentes educativos, en el nivel en que se encuentren y en las
circunstancias en que ejerzan su tarea, asumen una responsabilidad en el
proceso de socialización de los individuos. El aprendizaje se hace
durante toda la vida y en todos los grupos humanos, en los que se
requiere siempre un considerable esfuerzo de cara a que la adecuación a
la vida de los grupos sea lo menos traumática y más liberadora posible.
Dado que el proceso de socialización se realiza por mecanismos de
aprendizaje en su mayor parte inconscientes, debe tenerse en cuenta la
responsabilidad del sistema educativo en lo que tiene que ver con
valorar, asumir, analizar y hacer consciente la tradición oral.
La
tradición oral,
fundamento del avance cultural, se trasmite con mucha lentitud. Ideas
que se manejaban a finales del siglo XIX, calaron en la sociedad durante
el siglo XX, algunas de ellas fueron reprimidas por las dictaduras,
movimientos reaccionarios o fascistas del siglo XX, y sin embargo
estuvieron presentes en la conciencia colectiva de la sociedad durante
todo el tiempo hasta aflorar paulatinamente con la llegada de las
libertades, en que se mezcla lo reprimido, lo que estaba en
la
superficie, la cultura oficial y la clandestina…
La
tradición
es un
elemento referencial.
La
vuelta a los ancestros, el orden, la ley,
la
dialéctica entre lo nuevo y las raíces,
determinan un
modo
de
ver la realidad en cada momento, se adecuan a las formas, filosofías y
maneras de pensar de cada tiempo y son, de alguna forma, los cronistas
que nos permiten conocer cómo han ocurrido los hechos de los últimos
cien años.
Este sitio
destaca la importancia en todo el sistema educativo, desde preescolar
hasta la Universidad lo que significa la tradición oral en nuestra
cultura, y sobre la necesidad de plantearse su utilización como
objetivo, medio, recurso y contenido en la realización del currículum.
Las sociedades y los grupos humanos están en una permanente dialéctica
entre el cambio, necesario para la supervivencia y la reserva de las
tradiciones como elemento de referencia. Dada la importancia y
relevancia que en
la sociedad
humana
ha
tenido para la conformación de la cultura la transmisión de pautas de
relación, la creatividad, el trato rico en matices
y
rasgos culturales, es importante que los educadores utilicen el bagaje y
patrimonio cultural en beneficio de una mayor profundidad en el
aprendizaje, sin olvidar la metodología que se sustenta. En la
antigüedad, nuestros antepasados, escribían poco y con grandes
dificultades, y las posibilidades de recurrir a la lectura eran exiguas
o nulas. Esto sirvió de base para la creación de formas de expresión
orales y gestuales, y para la formación y el enriquecimiento del idioma.
La
mayoría de las obras literarias de la antigüedad, han sido posibles
gracias al cúmulo de información que se transmite de unas a otras
generaciones.
Sin la tradición oral no se hubiera efectuado la transmisión de
conocimientos y por ende la utilización de los instrumentos, las
tradiciones, las advertencias y consejos, los usos, las leyes y las
costumbres, claves para la supervivencia de la especie humana. La
riqueza cultural es posible así mismo por la gama de matices
relacionales, la interelación de sus visitantes con los pobladores, la
riqueza étnica y cultural.
Muchas de las obras literarias de la actualidad se deben igualmente a
que un escritor ha sido capaz de plasmar con arte por escrito lo que se
transmite en las familias de padres a hijos.
En
todas las áreas de estudio, y en cualquiera de los niveles de la
enseñanza, se hace necesario el uso de la tradición oral. En los casos
de enseñanzas sociales, de barrio, de comunicación asociativa, es
todavía más importante tener en cuenta las pautas culturales que
proporciona la tradición oral como complemento documental, o como
instrumento de trabajo. La transversalidad se hace imposible sin contar
con la transmisión verbal de los
conocimientos, al mismo tiempo que con otros medios, dado el papel que
tiene en la sociedad.
Como elemento transversal, las estrategias interdisciplinares
son la
vía para lograr la transversalidad, y al mismo tiempo base y fundamento
de análisis y estudio de cualquiera de las áreas de un programa de
trabajo.
Las tres últimas generaciones y
sus
recuerdos, datos, productos, costumbres que se remontan fácilmente a
otras tres o cuatro
generaciones
más, son
necesarias para
el
estudio de nuestra sociedad y el de otras realidades culturales cercanas
o lejanas.
Con la ayuda de este
sitio
se
intenta que
quienes lo
deseen, siguiendo los
métodos y propuestas que se plantean en los nuevos diseños curriculares,
puedan aprender a ver las raíces cercanas, próximas, con el fin de que
sirva para aportar a sus vidas.
Se
presentan ideas y sugerencias de actividades, así como preguntas y
reflexiones para que los alumnos, con la ayuda de los profesores,
descubran e investiguen sobre sus raíces con el fin convertirse en
sensibles a sus datos, pautas y a sus encantos, y en investigador de sus
realidades. |