Ciudadano Kane (Citizen
Kane)
EE.UU. 1940. 115 min.
Drama. B/N.
Dirección: Orson
Welles.
Fotografía: Gregg
Toland.
Guión: Orson
Welles, Herman J. Mankiewicz.
Música:
Bernard Herrmann.
Intérpretes:
Orson Welles, Joseph Cotten, Dorothy Comingore, Agnes Moorehead, Ruth
Warrick, Ray Collins, Erskine Sanford, Alan Ladd.
Sinopsis:
El film
describe de un modo libre y muy personal la vida de William Randolph Hearst,
magnate de la prensa de los Estados Unidos y dueño de monopolios y
caprichos. Un importante financiero estadounidense, Charles Foster Kane,
dueño de una importante cadena de periódicos, de una red de emisoras, de dos
sindicatos y de una inimaginable colección de obras de arte, muere en su
fabuloso castillo de estilo oriental, Xanadú. La última palabra que
pronuncia al expirar es «Rosebud». El país entero y la prensa en general
quedan intrigados por saber el significado de esta palabra. Para
descubrirlo, un grupo de periodistas se pone a investigar.
Oscar 1941: Mejor guión
original. |
La soga. Rope
EE.UU. 1948. 77 min.
Intriga. Color.
Director: Alfred
Hitchcock.
Guión : Arthur
Laurents basado en la obra teatral de Patrick Hamilton.
Montaje :
William H. Ziegler .
Fotografía:
Joseph A. Valentine, William V. Skall.
Intérpretes:
James Stewart, John Dall, Farley Granger, Joan Chandler, Cedric Hardwicke,
Constance Collier, Edith Evanson, Douglas Dick, Dick Hogan.
Sinopsis: La
película tiene la misma duración en tiempo real que en tiempo fílmico. Toda
la acción tiene lugar en un apartamento neoyorquino durante una tarde de
verano. Dos muchachos, homosexuales, estrangulan por puro placer, siguiendo
una teoría extraña, a su compañero de estudios y ocultan el cadáver en un
baúl, unos minutos antes de que se celebre un cóctel. Al mismo están
invitados los padres de la víctima y su ex-prometida. También ha sido
invitado su antiguo profesor de la universidad. Siguiendo su macabro juego,
desean provocar la admiración del profesor hacia ellos, al demostrarle que
sí existe el crimen perfecto. En este intento irán descubriéndose. Al final
de la velada el profesor sabe que se ha cometido un crimen en uno de sus
alumnos. Utilizando métodos deductivos, los descubre desarmando sus
coartadas y aunque no comprende el extraño móvil, no duda en avisar a la
policía. |