Tema 5.
Turismo para todos
Objetivos
Valorar positivamente la importancia que tiene
socialmente la idea de no hay nadie discriminado para hacer turismo
Analizar los diversos principio que rigen la idea
del turismo para discapacitados
Detectar las principales barreras psicológicas,
culturales y físicas que tienen las personas discapacitadas
Establecer la necesidad de una animación turística
para personas con carencias
Introducción
Con el fin de que se prepare mejor para abordar su
trabajo, antes de iniciar la lectura y estudio de esta unidad didáctica,
es conveniente reflexionar sobre las siguientes cuestiones:
?
¿Por qué razones y principios el turismo no
debe discriminar a ningún tipo de personas?
?
¿Cuáles son los principales cambios que
defe efectuar el sector turístico y hotelero para adecuar sus
instalaciones y recursos a las personas con discapacidad?
?
¿Cuáles son las diferencias entre
minusvalía y discapacidad?
?
¿Qué debe hacer un animador turístico para
favorecer la integración?
1.1.
Un turismo para
todos
El turismo se ha convertido
en un fenómeno social de extraordinaria importancia, que moviliza a
millones de personas en todo el mundo, especialmente, en Europa,
constituyendo no sólo un factor de riqueza y progreso económico sin
precedentes, sino también un elemento decisivo para la mejora del
conocimiento, la comunicación, el grado de relación y el respeto entre
los ciudadanos de distintos países. Con las nuevas tendencias del
turismo, se ha incrementado positivamente la presencia en los hoteles de
un cliente al cual no se le había prestado hasta entonces una adecuada
atención. Es el turismo con necesidades educativas especiales (físicas,
psíquicas y visuales).
Para las personas con
necesidades educativas especiales no todo ha acontecido de un modo fácil
y sencillo, ellos han recibido diversas clasificaciones, que estuvieron
influenciadas por variadas tendencias sociales, desiguales teorías
científicas y diferentes escuelas psicológicas. En ellas abundan los mas
disímiles criterios sobre discapacidades o minusvalidez; no olvidemos
que estas personas fueron por mucho tiempo causa de injustas
discriminaciones, segregaciones y marginaciones.
El turismo es un bien social
de primera magnitud que debe estar al alcance de todos los ciudadanos,
sin que ningún grupo de población pueda quedar excluido, con
independencia de las circunstancias personales, sociales, económicas o
de cualquier otra índole que concurran en sus componentes. Las personas
con discapacidad, que en la Unión Europea suponen un 10% de la población
global total, como consecuencia de su creciente grado de integración
económica y social, participan cada vez con mayor frecuencia en
actividades turísticas, no obstante los impedimentos, barreras y
dificultades de todo tipo que aún persisten y que les impiden el acceso
regular y normalizado a los bienes y servicios turísticos.
La supresión o atenuación de
estas barreras que limitan la práctica del turismo por parte de las
personas con discapacidad viene exigida no sólo por los principios de
igualdad de derechos y oportunidades y no discriminación que rigen en el
ámbito de la Unión Europea y en sus Estados miembros, sino que
representa también una medida eficaz para incorporar a nuevos grupos de
ciudadanos a las actividades relacionadas o derivadas del turismo,
contribuyendo así al crecimiento de un sector económico que, sobre todo
en los países del Sur de Europa, tiene una directa incidencia en la
generación de riqueza y empleo para toda la sociedad.
Principios de turismo para
discapacitados
Esta realidad incuestionable
ha llevado al movimiento asociativo europeo de personas con discapacidad
a proclamar unos criterios inspiradores en materia de turismo y
discapacidad que pueden sintetizarse en una suerte de decálogo, en el
que quedan sintetizadas las aspiraciones del sector social de la
discapacidad en lo que a turismo se refiere. Estos diez principios son
los siguientes:
1.
Las personas con discapacidad y,
especialmente, aquéllas con problemas de movilidad o comunicación,
tienen derecho al acceso regular y normalizado a los bienes y servicios
turísticos de toda índole.
2.
Los problemas de movilidad o de
comunicación que puedan presentar las personas con discapacidad no
servirán nunca de base para prohibir, negar, limitar o condicionar su
acceso a los bienes y servicios turísticos, en igualdad de condiciones
que el resto de ciudadanos.
3.
Los poderes públicos, en sus distintos
niveles (comunitario, nacional, regional y local), establecerán y
velarán por el cumplimiento de normas jurídicas y técnicas uniformes que
aseguren el libre acceso de las personas discapacitadas a los bienes y
servicios turísticos.
4.
Los poderes públicos promoverán, en la
esfera de sus respectivas responsabilidades, programas y acciones
dirigidos a fomentar la accesibilidad y la eliminación progresiva de las
barreras y obstáculos de todo tipo que impiden o dificultan a las
personas con discapacidad el acceso con seguridad y comodidad a
servicios turísticos satisfactorios.
5.
El turismo accesible o turismo para todos
no es una cuestión que corresponda en exclusiva a las autoridades
públicas, sino que su promoción y fomento es responsabilidad también de
todas las instancias privadas (operadores turísticos, agencias de viaje,
proveedores de transporte o alojamiento o responsables de atracciones
turísticas, etc.) que operan en este ámbito socioeconómico.
6.
La accesibilidad de los bienes y servicios
turísticos no debe provenir sólo de una imposición de las autoridades
públicas, que en todo caso deberán asegurar el uso y disfrute pleno y
efectivo por parte de las personas con discapacidad de las ofertas
turísticas existentes, sino de la libre decisión de los agentes
turísticos, que deben llegar al convencimiento de que el turismo para
todos es, además de una responsabilidad social, una oportunidad de
negocio y una ventaja competitiva para los productos y servicios de
turismo y ocio que ofrecen y prestan.
7.
Las autoridades públicas y los agentes
privados que operan en el ámbito turístico deberán tener muy en cuenta,
a efectos de ofrecer ventajas tarifarias y de contratación de productos
y servicios turísticos, la situación de objetiva desventaja de la que
parten las personas con discapacidad, especialmente la de aquéllas que
necesitan de la ayuda o el auxilio de tercera persona para la
realización de sus actividades de ocio y turismo.
8.
La posibilidad de acceso y utilización
libre de los bienes y servicios turísticos por parte de las personas con
discapacidad será uno de los elementos que se tomarán en consideración a
la hora de acreditar, otorgar y reconocer calificaciones de calidad a
los establecimientos e instalaciones turísticos (por ejemplo: estrellas
para los hoteles, tenedores para los restaurantes, etc.).
9.
Todos los materiales y los servicios de
información turística deberán recoger obligatoriamente menciones a las
condiciones de accesibilidad de los bienes y servicios turísticos
ofrecidos, de modo que las personas con discapacidad puedan conocer con
exactitud y anticipadamente las posibilidades en cuanto a libre acceso
de las ofertas turísticas.
10.
El movimiento social
de la discapacidad invita, en fin, a las autoridades europeas, a los
gobiernos nacionales, a las administraciones regionales y locales, así
como a los operadores privados del ámbito del turismo de los países
europeos a sumar esfuerzos para hacer de Europa, centro efectivo del
turismo mundial, un espacio libre de obstáculos y barreras abierto a
todas las personas.
1.2.
El cambio de los
espacios turísticos
En el III Congreso
Interdisciplinario sobre Barreras Arquitectónicas y Urbanísticas se ha
señalado que:
"...los espacios turísticos
deben ser el ámbito del encuentro y de la acción social. Deben
constituir armazones que favorezcan la creación de oportunidades para
una vida individual y social enriquecida e íntegra. Sin embargo, la
falta de planes y profundas razones sociales y económicas han ido
afectando esa función social y las han convertido en
fuentes de tensión, de divergencia y frustración. Si estas
circunstancias son de consecuencias negativas para las personas en
plenitud de sus capacidades y sentidos, son de efectos aún más agudos
para aquellas cuyas capacidades han sufrido una merma.
Las barreras arquitectónicas,
urbanísticas y del
transporte son particularmente crueles con...
Los
niños. El tránsito parece estar concebido en la suposición que el
peatón es un remanente de la población motorizada; el niño pierde en
este esquema la posibilidad de transitar, de acceder, inclusive de
utilizar la ciudad sin el cuidado paranoico de los mayores.
La tercera edad. Su "espacio
defendible",el que pueden recorrer sin excesiva angustia, es de escasa
extensión y esta acotado por la falta de enseres urbanos y toda
muestra de que la comunidad los entiende en su peculiar forma de
vida ( el 12% de la población es mayor de 60 años).
Los discapacitados. De
acuerdo a la UNESCO son el 10% de la población. Si solo advertimos en el
uso de la ciudad una proporción sensiblemente menor, se debe a la
eficacia de las barreras arquitectónicas, urbanísticas y del transporte
que marginan e impiden su integración a una vida activa.
Los parientes directos de
estos discapacitados. Solo adjudicando 3 personas por cada
discapacitado, se llega a 10.000.000 de argentinos.
Los discapacitados
transitorios .Embarazadas, enyesados, discapacitados viscerales.
Todos los agredidos por el
ruido, el tránsito y la incomunicación que quiebran el contacto con
la
naturaleza...".
Desde la óptica de distintas
disciplinas se afirma que nos dirigimos hacia una civilización del ocio
donde la correcta utilización del TIEMPO LIBRE del hombre adquiere una
importancia fundamental para su desarrollo psíquico y social.
1.3. Las
barreras humanas: segregación y prejuicio
Además de las barreras
arquitectónicas y urbanísticas que deben sortear las personas con
capacidades restringidas, existen otras a las que llamaremos "barreras
humanas" y que tienen que ver con la
actitud de los individuos entre sí. No solo se edifican ciudades y
edificios tomando como referente a los individuos sanos y jóvenes, sino
que también se han construido ideales del yo de tales características,
que rinden culto a la
juventud, al esplendor, al
éxito, a la destreza, sea en un plano físico, como intelectual y
psicológico.
No hay lugar para el
deterioro, ni para el fracaso, medido en términos de una "normalidad"
cada vez más cercana al perfeccionismo extremo. El cuerpo debe ser
perfecto, y estéticamente bello, al igual que su destreza; y lo mismo
ocurre en todos los planos de la existencia: no hay lugar casi para la
imperfección, ni aceptación del deterioro. Los ideales colectivos operan
como MODELO para el yo, a los cuales éste intentará adecuarse,
internalizándolos, y constituyéndose en base a ellos el IDEAL DEL YO
como instancia de la personalidad.
Así, se ha construido una
cultura en la que todo aquél que no se amolde a los ideales colectivos,
resulta víctima de la segregación y el rechazo, no siempre concientes,
ni voluntarios, pero que se expresan de modos diversos. Los ancianos,
los minusválidos, los que están fuera -por un motivo u otro- del proceso
productivo, resultan segregados, marginados, rechazados.
Estos sentimientos de rechazo
y segregación han existido en todas las culturas, en distintos momentos
históricos, en que se han tomado ciertos sub-grupos que resultaron
marginados, discriminados y de algún modo perseguidos y apartados de la
vida colectiva. Se han proyectado sobre ellos aquéllos aspectos temidos
por la mayoría, dando lugar a la exteriorización del rechazo de modos
diversos, que van desde el viejo porque es muy viejo hasta la sutil
segregación laboral del joven porque es muy joven (e inexperto).
Se ha construido un mundo
donde todo aquél que no encarne el ideal colectivo es segregado,
marginado, apartado. Estamos frente a un Otro que encarna aquéllos
aspectos temidos y negados de uno mismo y que muestra del modo más cruel
la decrepitud que no se quiere ver, las minusvalías, deterioros e
incapacidades. Así se diseñan, planifican y publicitan espacios
recreativos y turísticos que muestran a las personas jóvenes, atléticas,
bellas, exitosas, en pleno ejercicio de sus capacidades físicas y
psicológicas.
Ya no se sostiene una
supuesta superioridad de unos sobre otros apoyándose en argumentos que
suponen una diferencia biológica, o una inferioridad natural (como
quería Aristóteles, respecto de los bárbaros en relación al ciudadano
griego), puesto que los mecanismos de la segregación son mucho más
sutiles hoy. Los niños consumen héroes todopoderosos que encarnan su
ideal, un ideal que no conoce barreras, que todo lo puede, todo lo
derriba.
1.4. Valías
y capacidades
Es importante como encuadre
teórico de este ensayo establecer la diferencia entre valía y capacidad.
"...Tradicionalmente
encontramos dos conceptos: discapacidad y minusvalía, muchas veces
utilizados como sinónimos, que marginan conciente o inconcientemente a
un grupo numeroso de personas. En primer lugar se presenta la necesidad
de diferenciar las capacidades/discapacidades y las valías/minusvalías a
fin de comprender que esta problemática social nos involucra a todos y
no solo a un grupo reducido de personas.
Las capacidades son
cuestiones propias del individuo y hay distintos tipos de
discapacidades: las motrices, las visuales, las auditivas, etc.
En cambio la "valía" es la
relación entre la capacidad de uno y el medio físico que lo rodea.
Podemos decir que por un lado las capacidades o discapacidades son temas
médicos, y por el otro que las valías o minusvalías son temas de todos
porque todos somos minusválidos en algún momento de nuestra vida. A
titulo de ejemplo de esta afirmación podemos decir que:
-un niño es minusválido
cuando no alcanza a accionar el disco de un teléfono público,
-una mujer embarazada o un
anciano son minusválidos cuando no puede acceder a su hotel o
restaurante por distintos impedimentos físicos (una escalera por
ejemplo),
-una persona enyesada o de la
tercera edad (corresponde al 12% de la población) son minusválidos
cuando carecen de equipamiento urbano en los espacios públicos para sus
necesidades de descanso,
Definición. Son minusválidos
aquéllos que tienen restricciones motoras, visuales y auditivas -que de
acuerdo a la Unesco son el 10% de la población mundial-, que son poco
advertidos debido a la eficiencia de las barreras arquitectónicas y
urbanísticas que impiden su integración a la vida activa y que junto con
sus parientes directos según estadísticas mundiales afectan en conjunto
al 40% de la población mundial..."
En el año 1992 la
ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD -OMS- estableció que existe
aproximadamente un 10% de personas discapacitadas en el mundo, lo que
permite englobar en este segmento a aproximadamente 500 millones de
personas. Este análisis cuantitativo no considera el conjunto de
personas que conforman el segmento de personas con capacidades
restringidas -ancianos, enanos, niños, discapacitados temporales
-mujeres embarazadas, personas enyesadas, etc.-, llegando a un volumen
del 40% de la población mundial como fue expuesto en el congreso de
1992.
La ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE
TURISMO -OMT- prevé para los años venideros aumentos importantes y
significativos del flujo turístico mundial, en el cual el segmento por
ejemplo de tercera edad tiene un crecimiento significativo y en aumento
constante, lo que define en el caso de las personas con capacidades
restringidas un mercado potencial de millones de personas.
1.5. Turismo
para la integración
Debemos considerar
básicamente tres variables al analizar la integración de las personas
con capacidades restringidas durante el tiempo libre dedicado al turismo
y la recreación:
Las personas con
capacidades restringidas
En el espacio cultural urbano
y/o rural se desenvuelve un conjunto de visitantes que genéricamente
podemos denominar personas con capacidades restringidas:
este concepto integral
involucra a todas aquellas personas -entre otros segmentos se destacan
la tercera edad, niños, grupo familiar, discapacitados temporales y
permanentes, etc.- que durante el acceso, recorrido o uso del entorno en
un medio natural o cultural encuentran algún grado de dificultad para su
desplazamiento; requiriendo la plena accesibilidad al medio físico
-arquitectónico, urbanístico y del transporte- junto a la comunicación
complementaria necesaria que le permita obtener la plena integración
funcional, física y social.
Es necesario considerar que:
"... Para el pleno desarrollo
de un individuo se necesita potencializar principalmente tres variables:
la confianza en si mismo, la independencia y sentimiento de solidaridad
en las distintas fases de su desarrollo (individual, de pareja, grupal o
social). Lo expuesto plantea considerar tres etapas de integración
durante el desarrollo de actividades turísticas y recreativas:
1- una integración física,
que le permita acercarse a otras personas o transitar por cualquier
espacio geográfico.
2- una integración funcional,
que le permita coordinar los distintos servicios y que no permita una
discriminación con las personas sin movilidad restringida.
3- una integración social ,
utilizando juntos los diferentes servicios y atractivos a través de la
cooperación entre las distintas personas intervinientes en el desarrollo
de la actividad turística, basándose en sus intereses mutuos..."
Podemos clasificar
genéricamente los segmentos según el nivel de minusvalía como:
Ambulatorios:
son aquellas personas que se desplazan por un espacio físico con algún
grado de dificultad, con la ayuda o no de elementos complementarios.
Este segmento encuentra dificultades de desplazamiento para salvar
pendientes pronunciadas o desniveles por problemas de fuerza como de
equilibrio, para recorrer largas distancias sin descansos, etc.; también
para acceder al equipamiento urbano inalcanzable por su altura, para
sentarse o levantarse por el mal diseño ergonómico de los mismos o por
discapacidad, etc. El modelo más representativo por el mayor grado de
dificultad que encuentra durante su desplazamiento es la persona en
silla de ruedas.
Sensoriales:
son aquellas personas que se desplazan con algún grado de dificultad de
percepción, debido a las limitaciones de sus capacidades sensitivas
principalmente auditivas o visuales. Este segmento encuentra
dificultades durante el desplazamiento y uso por limitaciones de
comunicación en el desarrollo de actividades programadas individuales o
colectivas. El modelo más representativo por el mayor grado de
dificultad que encuentra durante su desplazamiento es la persona no
vidente y aquella afectada por la falta de audición.
Resumen
El
turismo es un bien social de primera magnitud que debe estar al alcance
de todos los ciudadanos, sin que ningún grupo de población pueda quedar
excluido, con independencia de las circunstancias personales, sociales,
económicas o de cualquier otra índole que concurran en sus componentes.
La supresión o atenuación de las barreras para
discapacitados representa también una medida eficaz para incorporar a
nuevos grupos de ciudadanos a las actividades relacionadas o derivadas
del turismo.
Además de las barreras arquitectónicas y
urbanísticas que deben sortear las personas con capacidades
restringidas, existen otras a las que llamaremos "barreras humanas" y
que tienen que ver con la actitud de los individuos entre sí.
Ya no se sostiene una supuesta superioridad de
unos sobre otros apoyándose en argumentos que suponen una diferencia
biológica, o una inferioridad natural.
Tradicionalmente encontramos dos conceptos:
discapacidad y minusvalía, muchas veces utilizados como sinónimos, que
marginan conciente o inconcientemente a un grupo numeroso de personas.
Las capacidades son cuestiones propias del
individuo y hay distintos tipos de discapacidades: las motrices, las
visuales, las auditivas, etc.
La "valía" es la relación entre la capacidad de
uno y el medio físico que lo rodea. Podemos decir que por un lado las
capacidades o discapacidades son temas médicos, y por el otro que las
valías o minusvalías son temas de todos porque todos somos minusválidos
en algún momento de nuestra vida.
Son minusválidos aquéllos que tienen
restricciones motoras, visuales y auditivas.
Personas con capacidades restringidas son todas
aquellas personas -entre otros segmentos se destacan la tercera edad,
niños, grupo familiar, discapacitados temporales y permanentes, etc.-
que durante el acceso, recorrido o uso del entorno en un medio natural o
cultural encuentran algún grado de dificultad para su desplazamiento.
Ejercicios de autoevaluación
1.
El turismo a veces debe ser restringido a
personas
a)
Con minusvalías
b)
Con discapacidad
c)
Con capacidades restringidas
d)
A ninguna de las anteriores
2.
Se denominan barreras humanas
a)
A las que crean los individuos entre sí
b)
A las barreras que tienen las personas
c)
A las que impiden a las personas acceder a
algún lugar
d)
B y c
3.
Relación entre la capacidad de uno y el
medio físico que lo rodea se llama
a)
Capacidad
b)
Valía
c)
Posibilidad
d)
Capacitación
4.
De acuerdo con la UNESCO los discapacitados
son
a)
El 5% de la población mundial
b)
El 10% de la población mundial
c)
El 12,5% de la población mundial
d)
El 15% de la población mundial
5.
La integración social permite
a)
acercarse a otras personas o transitar por
cualquier espacio geográfico
b)
coordinar los distintos servicios
c)
relacionarse en la cooperación entre
distintas personas
d)
el encuentro entre personas sin movilidad
restringida.
6.
Las tres variables del desarrollo son
a)
Confianza en sí mismo, creatividad y
solidaridad
b)
Solidaridad, personalidad e independencia
c)
Independencia, solidaridad y confianza en
sí mismo
d)
Confianza en los demás, solidaridad e
independencia
7.
El nivel ambulatorio de minusvalía es el
que
a)
Tiene dificultades de percepción
b)
Tiene dificultades de desplazamiento
espacial
c)
Tiene dificultades de desplazamiento por
limitaciones de comunicación
d)
Tiene dificultades de desplazamiento por
dificultades de percepción
8.
Las dificultades de desplazamiento
perceptivas se llaman
a)
Sensoriales
b)
Ambulatorias
c)
Perceptivas
d)
Ninguna de las tres
9.
La mayor dificultad en el nivel ambulatorio
se considera
a)
Salvar pendientes pronunciadas
b)
Salvar situaciones de espacio por
invidencia
c)
Incapacidad de acceder por causa de un mal
diseño del mobiliario
d)
La dificultad de una silla de ruedas
10.
La mayor dificultad en el nivel sensorial
se considera
a)
Salvar pendientes pronunciadas
b)
Salvar situaciones de espacio por
invidencia
c)
Incapacidad de acceder por causa de un mal
diseño del mobiliario
d)
La dificultad de una silla de ruedas
|