2.
El aprendizaje
Bruner dice que
«cada generación da nueva forma a las
aspiraciones que configuran la educación en su época. Lo
que puede surgir como marca en nuestra propia generación
es la preocupación por la calidad y aspiraciones de que
la educación ha de servir como medio para preparar
ciudadanos bien equilibrados para una democracia».
Como idea general podríamos decir que Bruner se plantea
los siguientes interrogantes:
¿Cómo se aprende?
¿Se puede enseñar cualquier cosa a cualquier edad?
¿Cómo podemos ayudar desde fuera al que aprende?
2.1.
Cómo se aprende
"El alumno que aprende física es un Físico y es más
fácil para él aprender física comportándose como físico
que haciendo cualquier otra cosa".
Bruner está preocupado en inducir una participación
activa del alumno en el proceso de aprendizaje, sobre
todo teniendo a la vista el énfasis que pone en el
aprendizaje por descubrimiento.
La actividad intelectual es en todas partes y niveles
del Sistema educativo la misma, ya sea en la Universidad
o en pre‑escolar. Lo que un hombre de ciencia hace en su
escritorio o laboratorio o lo que hace un crítico
literario al leer un poema, es del mismo orden que lo
que hace cualquiera que aprende o se dedica a
actividades semejantes, si es que ha de alcanzar su
entendimiento. La diferencia es de grado y no de clase.
2.2. ¿Se
puede enseñar cualquier cosa a cualquier edad?
"Cualquier materia puede enseñarse a cualquier persona
siempre que se lo haga en alguna forma adecuada"
Bruner lanza esta afirmación un tanto irritante
considerando que el alumno evoluciona intelectualmente,
que se da en distintos momentos su desarrollo
intelectual y que en cada uno de estos momentos el
alumno tiene una manera característica de considerar al
mundo y de explicárselo a sí mismo. La tarea de enseñar
una materia a un alumno de cualquier edad requiere que
le presentemos la estructura de esa materia de acuerdo
con la manera que tiene el alumno de considerar las
cosas.
Esta hipótesis general se basa en que cualquier idea
puede representarse adecuada y últimamente en las formas
del pensamiento del alumno en edad escolar, en la
adolescencia o en educación permanente de adultos. Las
primeras representaciones pueden más tarde hacerse más
fácilmente potentes y precisas en virtud del primer
aprendizaje.
2.3. ¿Cómo
podemos ayudar desde afuera al que aprende?
Es éste el problema de la instrucción. Bruner sostiene
que el desarrollo mental depende en gran medida de un
crecimiento de afuera hacia adentro: Un dominio de
técnicas que encarnan a la cultura y que nos son
transferidas por sus agentes mediante el diálogo.
La instrucción es la que procura los medios y los
diálogos necesarios para traducir la experiencia en
sistemas más eficaces en sus significados y en su orden.
La instrucción consiste en llevar al que aprende a
través de una serie de exposiciones y planteamientos de
un problema o de un cuerpo de conocimientos que aumenta
su capacidad para captar, transformar y transferir lo
que aprende.
2.4.
Conceptualización
Bruner piensa que la enseñanza efectiva surgirá
solamente de la comprensión del mismo proceso de
aprendizaje, la que está muy ligada con el entendimiento
que ganemos acerca de nuestro propio proceso o modo de
pensar.
Primeramente señala que los seres humanos tienen una
fantástica capacidad para discriminar objetos o procesos
en su ambiente. Observa que para que una persona pueda
dar sentido a su ambiente ha de seleccionar de un casi
infinito número de objetos discriminables, los que
parece que tienen algo en común y considerarlos como una
simple categoría o un manejable grupo de categorías. Lo
que hace la persona es conceptualizar o categorizar.
Por ejemplo, un alumno que aprende a discriminar e
identificar un cierto grupo de animales como "perros" lo
que hace es formar una categoría o concepto que le
permite organizar esos objetos de su ambiente. En
realidad, lo que hace es generalizar a partir de ciertas
características comunes en las cuales no se tienen en
cuenta diferencias particulares, como serían: raza,
color, tamaño, etc.
Características del proceso de conceptualizaron
Podemos destacar algunas características del proceso de
conceptualización:
a) El concepto es una categoría que sirve para
clasificar objetos y/o acontecimientos del ambiente;
b) Esta clasificación ha de estar llena de significados;
c) Esta clasificación es un modo de entender
discriminativamente lo que rodea a una persona.
Conceptualización es, entonces, el proceso por el cual
el ser humano clasifica los objetos y acontecimientos,
en una forma significativa, como un modo de entender
discriminativamente lo que le rodea.
2.5.
Tipos de categorías
Los dos tipos de categorías básicos de Bruner son: la
identidad y la equivalencia.
2.5.1.
Identidad
Formamos una categoría de identidad cuando relacionamos
intelectualmente cierto número de diferentes variaciones
de un mismo objeto. Por ejemplo: la luna pasa por
diversas fases que van desde el apenas visible
crecimiento hasta la que se ve por entero, pero es
posible clasificar cada fase de la luna, como una
"luna".
2.5.2.
Equivalencia
Una categoría de equivalencia es aquella por la cual
diferentes clases de objetos se ven relacionados los
unos con los otros (es un clase nueva).
Por ejemplo: si tenemos las siguientes clases de
objetos: pala, martillo, pico, tenaza, taladro
eléctrico, podemos construir una nueva categoría
atendiendo a alguna característica común: todos son
instrumentos o herramientas. Esta es la nueva categoría
y lo es de equivalencia.
Las categorías de equivalencia se dan en tres formas:
afectiva, funcional y formal.
Formas de equivalencia
a) Equivalencia afectiva:
Por ejemplo: elementos componentes del medio ambiente
como caballo, perro, gato, pueden formar una categoría
como "los amigos del hombre". En esta categoría cada uno
de los componentes cumple con la característica de ser
"amigo del hombre". Pero, ¿es propiedad del caballo ser
amigo del hombre?. Evidentemente no. Si las
características no eran propiedades de los objetos en
cuestión, considerado en sí mismo, ¿quién las puso?.
Observamos en el ejemplo que los criterios para la
formación de categorías están en el hombre mismo y según
Bruner son de orden afectivo. Es por ello que llama a
estas categorías, de equivalencia afectiva. Cada objeto
de la categoría es equivalente a las demás en cuanto a
que en la persona que así categoriza generan o evocan la
mima respuesta afectiva.
b) Equivalencia funcional:
Cuando empleamos la categoría "medios de transporte" es
común referirnos a objetos muy diversos como: bicicleta,
avión, tren, barco, camión, carretilla, etc. ¿Cuál ha
sido el criterio para agrupar objetos tan distintos en
una misma categoría?. En este caso el criterio ha sido
atender a una función que de alguna forma u otra cumple
cada caso particular. Bruner llama a esto "categoría de
equivalencia funcional" y la define como aquella "que
permite que todos aquellos discriminados como poseedores
de la misma función se coloquen en la misma clase".
c) Equivalencia formal:
A todas las figuras de tres lados, tres vértices y tres
ángulos las categorizamos como "triángulos". Podemos
observar en el ejemplo que las categorías formales
surgen cuando una persona especifica en forma deliberada
las propiedades intrínsecas por las cuales un objeto ha
de colocarse en una determinada categoría. La
categorización formal usa símbolos ‑a veces matemáticos‑
y es ampliamente utilizada en la ciencia.
2.6. ¿Cómo se
conceptualiza o categoriza?
Es un proceso interno en muchos casos inconsciente e
indescriptible por quien lo experimenta. Para Bruner
consiste en una serie de decisiones que se toman
deliberadamente para alcanzar una meta ‑tal como
construir un concepto‑ y le llama estrategia.
Así, una estrategia es cualquier serie de situaciones
mentales que requieren decisión que está orientada hacia
una meta. Por lo tanto, mediante el uso de una
estrategia es como se verifica la conceptualización.
Las estrategias se aprenden y su aprendizaje
(comprendido ‑ incluso mejorado) solo reconoce los
límites genéticos del propio individuo.
2.7.
Codificación
Las posibilidades humanas de conocer no se agotan en la
conceptualización sino que van más allá: el hombre es
capaz de unir conjuntamente conceptos en
generalizaciones de causa y efecto, es decir, es capaz
de codificar.
Para Bruner: "Un sistema de codificación se puede
definir como un conjunto de categorías no específicas
contingentemente (en dependencia) relacionadas". Esto
queda más claro cuando agrega que el problema de la
instrucción "se refiere al mejor sistema de codificación
que presenta las diversas materias, así como que
garantice al máximo la habilidad de generalizar".
O sea que Bruner ve el proceso de codificación como el
que combina los conceptos en generalizaciones. Y éstas
permiten predicciones "hacia adelante y hacia atrás" de
que determinadas aseveraciones posiblemente sean
verdaderas o falsas. En palabras del mismo Bruner: "una
buena teoría ‑ un buen sistema de codificación formal o
probabilístico‑ nos permitirá ir más allá de los datos
con que contamos, tanto en forma retrospectiva como
anticipada".
Vemos un ejemplo: Conocemos que la fórmula de superficie
del triángulo es bxh/2 . Si en un caso sabemos que el
valor de b es 4 cm. y el de h es de 3 cm. y queremos
averiguar la superficie del triángulo ABC, podemos hacer
la predicción "hacia adelante" de que dicha superficie
será 6 cm2. Y también, en el caso de que conozcamos que
la superficie triangular es 6 cm2 y el valor de la base
de 4 cm, podemos predecir "hacia atrás" que el valor de
h será 3 cm.
¿Dónde está en este caso la codificación?. pues en la
generalización que se expresa con la fórmula, la que
implica la relación interdependiente de varios conceptos
(b, h, dos, división, por), relación que tiene un
significado propio: superficie del triángulo.
2.8.
Tipos de códigos
Bruner reconoce dos tipos de códigos: formal, e informal
o probabilístico.
Un código formal toma la forma de, o está subsumido en
algún principio de lógica. Un ejemplo lo tenemos en la
fórmula de la superficie triangular ya mencionado.
También lo es el siguiente: "todos los objetos ocupan un
espacio que no puede ser ocupado simultáneamente por
otro objeto".
Un código informal o
probabilístico
es una generalización que se adquiere inductivamente, o
quizá incluso intuitivamente. Por ejemplo, después de un
curso escolar particularmente arduo, un profesor de
Enseñanza Media puede expresar la siguiente
generalización: "todos los estudiantes de Enseñanza
Media son indisciplinados y poco dispuestos a aprender".
Resumiendo, un código puede considerarse como una
generalización, por lo común bajo la forma de "si...
entonces...", por lo cual se pueden deducir las
consecuencias de los actos anteriores y, por tanto,
poder predecir las consecuencias de los futuros.
2.9.
Estructura de los códigos
Los códigos pueden relacionarse con otros códigos, "ad
infinitum". Por consiguiente, llegamos a tener sistemas
de códigos.
Un sistema de códigos que se refiera a una materia
determinada proporciona la estructura de esta materia.
La historia, las matemáticas, el lenguaje, las artes
industriales, la música o la táctica de fútbol, tienen
una estructura propia y determinada, formada por
sistemas de códigos.
A medida que un código se edifica sobre otro código, el
que aprende adquiere crecientemente "amplios"
conocimientos de una materia. Esto es, ve continuamente
un creciente número de conceptos y generalizaciones
relacionados. Cuanto más genérico o generalizado sea un
sistema de códigos, más útil será para el que aprende.
Cuanto más se relacionan, más se libera el que aprende
de la necesidad de aprender y recordar un gran número de
hechos. Como Bruner indica, una buena codificación
produce una situación en la que "... se reconocen nuevos
ejemplos sin necesidad de aprenderlos y el recuerdo de
los mismos en una necesidad previamente experimentada,
no depende de la retención. Porque ahora, mediante el
conocimiento del código, el sujeto puede reconstruir el
hecho de que todos los positivos ejemplos
experimentados, estuvieron marcados por ciertos
atributos críticos".
Indicar la última meta de la enseñanza de una materia o
grupo de materias relacionadas es "... la general
comprensión de la estructura de la materia". Pero cuando
aplica la palabra estructura a una materia no utiliza el
término en el mismo sentido en que frecuentemente se la
usa. "Asir la estructura de una materia es comprenderla
de tal manera que nos permita relacionar con ella otras
cosas significativamente".
En cuanto a quiénes pueden llegar a este aprendizaje,
Bruner sostiene que no es solo para estudiantes
"brillantes". Por el contrario todos pueden
conceptualizar y generalizar hasta que la materia se
contempla como un conjunto relacionado. Y los
estudiantes lentos parecen obtener mejores beneficios
cuando su método educativo tiene como objetivo las
estructuras. Posiblemente sea debido a que los
estudiantes brillantes pueden hacer mucho por su propia
estructuración.
2.10.
Formas de representación
Bruner se interesa por las etapas evolutivas del
desarrollo intelectual, que tiene que ver con el modo de
representación del mundo exterior. Estas etapas de
crecimiento mental se caracterizan por una creciente
independencia del pensamiento. Son etapas progresivas
del desarrollo mental y orgánico, en las cuales cada
etapa se apoya en la que le antecede y prepara a la que
le sucede. El desarrollo de la autoexplicación permite
al alumno pasar del comportamiento adaptable al uso
consciente de la lógica y del razonamiento.
Por el proceso de independencia del pensamiento, pasamos
de las acciones concretas a las abstracciones, etapa en
que nos manejamos con códigos de categorías de
símbolos. La etapa intermedia es llamada por Bruner de
la "presentación icónica".
Veamos qué implica cada forma de representación.
2.10.1.
La forma de representación en acción
La forma de representación en acción implica que los
acontecimientos y objetos del ambiente se conocen en
razón de las acciones que provocan. Así, para un alumno
de corta edad, las cosas son "lo que él hace de ellas".
Por ejemplo: sonajero es "algo que agito".
2.10.2.
Representación por la imagen
La representación por la imagen, o representación
icónica constituye un nivel mayor de autonomía del
pensamiento. Las imágenes se convierten en grandes
resúmenes de la acción, en las que el interés está
centrado en la forma el tamaño y el color. La
representación icónica se rige principalmente por
principios de organización perceptiva.
2.10.3.
Representación simbólica
La representación simbólica es aquella manifestada por
las palabras o el lenguaje. Los símbolos son
arbitrarios; su referencia a las cosas es muy remota "y
casi siempre son marcadamente productivos o generativos
en el sentido de que un lenguaje o cualquier sistema de
símbolos tiene reglas para la formación y transformación
de frases que pueden dar un sentido exacto de la
realidad mucho más de lo que sería posible mediante
imágenes o actos". La representación simbólica
constituye un modelo que sirve para resolver problemas.
2.11.
Aprendizaje
Aprendizaje es el proceso de interacción en el cual una
persona obtiene nuevas estructuras cognoscitivas o
cambia antiguas ajustándose a las distintas etapas del
desarrollo intelectual.
El aprendizaje como proceso interno implica para Bruner
cuatro momentos o etapas por las cuales un sujeto
aprende:
a) Predisposiciones: Constituyen los motivos internos
que
mueven al sujeto para iniciar y mantener el proceso de
aprendizaje.
b) Exploración de alternativas: Constituyen las
estrategias internas que, activadas por la
predisposición se mantienen en la búsqueda hasta lograr,
mediante distintos ensayos descubrir lo que se buscaba.
c) Salto intuitivo: Es un estado, logrado generalmente
de manera súbita como resultado del proceso del
pensamiento. No es expresable verbalmente, a veces es
muy rápido, otras lento, y extendido en el tiempo.
d) Refuerzo: Es el momento en que el que aprende
considera valiosos sus hallazgos, válidas sus hipótesis,
se corrige y se perfecciona.
2.11.1
Predisposiciones
Ya dijimos que son los motivos internos al aprendizaje y
que mueven en la exploración de alternativas.
Estos motivos son de cuatro clases:
a) Curiosidad: Es el prototipo del motivo intrínseco. Es
sentirse atraído con una atención centrada en algo que
no es clara, que está sin terminar o que es incierto.
b) Competencia: Es el comportamiento que conduce a la
comprensión efectiva, a la manipulación y el abandono de
los objetos. Ser competente es haber adquirido una
capacidad, una habilidad, una disposición, una acción
recíproca entre el individuo y su medio.
c) Identificación: Comprende estados por los cuales
existe una marcada intención humana a seguir el modelo
de otra persona, es aspirar a "ser como...".
d) reciprocidad: Está identificada como una profunda
necesidad humana de responder a los otros y de obrar
conjuntamente con ellos en pos de un objetivo, siendo la
única recompensa haberlo logrado.
2.11.2. Exploración de alternativas:
Bruner otorga gran importancia al modo como el sujeto
aprende. Para ello habla de ciertas estrategias
cognoscitivas internas, que movidas por las
predisposiciones, se ponen en juego para explorar
alternativas y que a través de distintas actividades de
indagación, dan como resultado el aprendizaje por
descubrimiento, señalamos que este proceso ayuda al
educando a aprender las diversas formas de resolver
problemas, de transformar la información para usarla
mejor: le ayuda en definitiva a aprender.
2.11.3‑ Salto intuitivo:
Es una aprehensión inmediata. Esta comprensión intuitiva
implica el acto de captar el significado, el alcance o
la estructura de un problema o situación sin la
intervención de métodos formales de análisis y pruebas.
El proceso previo a la captación súbita no avanza por
pasos cuidadosos y bien definidos, tiende a incluir
maniobras basadas aparentemente en una percepción
implícita de la totalidad del problema. Por este proceso
previo el pensador llega a una respuesta, que puede ser
correcta o incorrecta, con muy poca o ninguna conciencia
del proceso mediante el cual llegó a ella.
Como ejemplo podemos citar el descubrimiento de
Arquímedes. |