Aprender a
contar historias con imágenes y palabras
No es lo mismo un guión para un spot publicitario, que
para un documental que para una serie de ficción, que para una película, que
para un programa concurso.
Un guión debe realizarse contando una historia que se
pueda realizar. El mismo relato se puede localizar en ambiente difíciles e
conseguir, que necesitan mayores y más caros decorados o en lugares más
accesibles a los productores. En muchas ocasiones, depende la la imaginación
del guionista en ambientar un relato el que el guión sea utilizado o
rechazado. El guionista, con los pies en el suelo, piensa en que su guión va
a ser posible llevarlo a cabo, ubicando sus historias en lugares accesibles,
no extraordinariamente costosos.
Personajes
No se crean personajes inútiles. Todos los personajes
deben aportar algo a la historia. Hay una diferencia importante entre una
película de cine y una producción para televisión, una diferencia que
percibe sobre todo el receptor. El cine tiene una pantalla ancha en la que
puede acomodar de forma fácil y clara escenas con muchos personajes a la
vez. En una pantalla de televisión, cuatro es multitud.
Habitualmente una obra tiene más de cuatro personajes,
pero en televisión no se deben tener en pantalla todos al mismo tiempo. Una
excepción, por supuesto, son las escenas en fiestas, batallas, deportes,
pero están solamente como parte del fondo.
El primer plano
Es el rostro del personaje, de gran importancia cuando
se quieren manifestar detalles, deseos, sentimientos... En la pantalla
pequeña de la televisión, tiene una gran importancia el primer plano. Los
desarrollos dramáticos y los puntos vitales para la trama siempre se tratan
con los personajes a los que conciernen en primer plano. Su rostro es
importante, y la televisión, al contrario que el cine, huye de los planos
panorámicos y generales, ya que intenta centrar el interés en los
personajes. Rod Serling, uno de los primeros guionistas de televisión de
Estados Unidos decía «La clave para cualquier dramatización en la televisión
es la intimidad, y el estudio de los rostros en la pequeña pantalla trajo
con él un significado y un poder mucho mayor que el uso que de ello se hacía
en el cine».
Papeles con diálogo
Las razones de mantener pocos personajes en escena en
una dramatización para televisión son:
1. La necesidad de no crear personajes inútiles. Todos
deben tener texto.
2. La necesidad de abaratar costes. Los actores
cuestan dinero. Las actores más conocidos y las estrellas pueden ser muy
caros. Sea cual sea el presupuesto con el que se trabaja, se consiguen
mejores actores tanto en los protagonistas como en los secundarios si tienes
pocos papeles con diálogo.
Las categorías de personajes son «actores»,
«figurantes» y «extras» y es importante
para el guionista comprender en qué consiste cada una
de las categorías para evitar costes innecesarios al ascender a un «extra»
al nivel de «figurante» o un «figurante» al de «actor».
Actores: Artistas con o sin diálogo que
están implicados en el desarrollo de la trama.
Figurantes: Un figurante se define como
un artista sin parte hablada que en el preciso momento en que sus
movimientos son grabados tiene una relación actoral directa con un actor que
está simultáneamente representando su papel tal y como está dispuesto en el
guión. Un figurante puede también actuar individualmente en una función
concreta particular del gremio al que figura que representa como, por
ejemplo, un revisor de autobús comprobando los billetes, un policía haciendo
la ronda o un camarero sirviendo bebidas. Los figurantes pueden incluso
decir algunas palabras fuera del guión, pertinentes a lo que ellos mismos u
otras personas están haciendo, según lo considere necesario el director.
Así, un revisor de autobús puede decir «Los billetes, por favor», o un
policía «Muévanse hacia allí», pero tal diálogo no necesariamente debe
aparecer en el guión.
Extras: Una persona o grupo de personas
que con su presencia contribuyen a dar más autenticidad a la atmósfera de
una escena (por ejemplo, clientes en un bar o un restaurante). Pueden llevar
trajes que les identifiquen como pertenecientes a un determinado gremio (por
ejemplo, animadoras o soldados).
Actores con habilidades especiales.
Habilidad especial quiere decir la habilidad de un actor para nadar, cantar,
tocar el piano, hablar una lengua extranjera con fluidez, tragar sables,
etc.
En la primera sección de un guión se establece dónde
se desarrolla la acción, se presenta a los personajes principales y se
explica a la audiencia en qué consiste el problema. De todas formas no de
debe olvidar que mientras se escriben las primeras escenas de una obra que a
nadie le preocupan demasiado los problemas de personajes a los que no conoce
o de personajes por los que no se siente una inmediata simpatía. El primer
objetivo debe consistir en estimular el interés del espectador desde el
inicio.
La identificación con los personajes es la clave para
que el espectador se sienta emocionalmente implicado. Leemos noticias de
choques en cadena en la autopista o accidentes de aviones en los que han
muerto docenas de personas sin derramar ni una lágrima, pero cuando alguna
persona que conocíamos -aunque fuera ligeramente- resulta afectada, nos
sentimos implicados y aun así, obviamente hay circunstancias, situaciones y
personajes sobre los que la audiencia necesita saber muy poco para sentir
simpatía y ansiedad.
Cuanto más cercana a la vida cotidiana esté la
historia mayor será el impacto que causará y, además, mayor la
responsabilidad del escritor, que debe ser consciente siempre del efecto que
su obra causará en la audiencia.
Después de haber presentado a los personajes y
explicado el problema, el nudo de la obra debe ocuparse de las consecuencias
que ese problema tiene sobre sus vidas y de cómo se enfrentan a él. Aquí nos
volvemos a encontrar de nuevo con la serie de preguntas y alternativas... Es
necesario construir la obra de forma que conduzca a una crisis, sea física o
emocional, una crisis que se convierta en un punto de inflexión en las vidas
de los personajes.
El tercer acto o parte final de la obra debe contener
la resolución de los conflictos. Los personajes deben resolver los
conflictos de forma creativa, no previsible, pues si los espectadores llegan
al desenlace antes de que se cuente, pueden sentirse estafados. El final de
la obra es tan importante como el principio. Los finales sorpresa son
geniales, pero deben emanar de forma natural de los personajes o de la
situación o de ambos a la vez, y no ser el resultado de un detalle
sorprendente del que no se le ha dicho nada a la audiencia.
Tiempo real. El que tarda en ocurrir un acontecimiento
en la realidad. Un fusilamiento visto en un noticiario de televisión se
desarrolla en fracciones de segundo.
Tiempo fílmico. El que se produce por manipulación
para acelerar o retardar los acontecimientos, el reproducir paso a paso, el
cambiar el orden de los sucesos, etc. de cara a presentar al espectador una
visión intencionada y distinta del acontecimiento. El fusilamiento citado
anteriormente, realizado a cámara lenta, puede hacer fijar en el espectador
detalles que facilitan la comprensión del mensaje y por lo tanto el
aprendizaje.
Tiempo de filmación. El tiempo que se tarda en filmar,
"rodar", una escena.
(Martínez-Salanova 2001)
Todos podemos inventar relatos de
ficción y realizar al detalle el guión ya sea lineal, en el las situaciones
ocurren una tras otra, o en paralelo, en el que confluyen varios acciones
paralelas en el tiempo, con el fin de que se rematen en una sola escena
final.
Es fundamental conocer la
importancia de la creatividad y de narrar mediante imágenes en movimiento.
Se entrará en primer lugar en el mundo de la realización de una película, de
un cortometraje o de un documental. Al mismo
tiempo, los que se inician tomarán contacto con la narrativa de la imagen en
movimiento, utilizando la cámara, filmando planos de diferentes tipos,
utilizando algunas técnicas y apreciando cómo se puede narrar una historia o
conocer y comunicar mejor la realidad.
Se valora así cómo a partir de la
imagen se pueden utilizar nuevos lenguajes, es decir, una forma diferente de
contar las cosas, y por lo tanto ensayar constantemente técnicas, efectos
especiales, trucos y maneras distintas de expresión que harán avanzar tanto
la técnica como la habilidad en expresarse por medio de la imagen.
(Martínez-Salanova)
(Kelsey, 2003)
Hay platós de todos los tamaños, desde pequeñas
habitaciones que se utilizan para entrevistas y tertulias, a enormes salas
del tamaño de un hangar de aviación que se utilizan para grandes dramas y
producciones espectaculares.
Lo que se puede ver en un plató. Desde la puerta, lo
más normal es ver el reverso de los decorados, que obstruye la visión y
parece no haber ni un centímetro de suelo vacío. Cables, focos, objetos de
atrezzo, etc. Inmediatamente deslumbran decenas de potentes focos que
cuelgan de una red de barras de iluminación que parece cubrir todo el techo.
Siguiendo hacia el interior del estudio, se ve que del otro lado de los
decorados la visión es completamente distinta.
Las estructuras de madera, tela, cartón piedra que no
dejaban ver el interior al entrar se han convertido, del otro lado, en
elegantes salas de estar, bungalows tropicales, lujosas habitaciones de
hotel, etc.… según la necesidad del guión y del programa.
Se ve cómo el personal que trabaja en el plató,
técnicos, ayudantes, cámaras, empujan cámaras conectadas con cables de un
decorado a otro; cómo los presentadores, actores y actrices ocupan su lugar
en los decorados; a los operadores de sonido colocando la «jirafa» (palo al
final del cual cuelga un micrófono) hasta colocarla lo suficientemente cerca
como para captar el diálogo; al ver todo eso hay que darse cuenta de que un
programa de televisión es un trabajo de equipo. Es sorprendente saber cuánta
gente está implicada en su producción.
La catalogación técnica del personal difiere a veces
de unos estudios a otros, pero siempre, además de los “visibles”,
espectadores, actores y presentadores y técnicos de plató, se encuentra el
director del estudio, el asistente del director del estudio y el director de
decorados, al equipo de cámaras, a los operadores de sonido y a muchos otros
sin cuyas habilidades y pericia el programa jamás llegaría a la audiencia.
En la sala de control, a veces llamada galería de
control, el director se sienta frente a un panel de «monitores» (pantallas
de televisión) cada uno de los cuales está conectado a una de las cámaras
del estudio. En una producción dramática normal hay unas tres o cuatro
cámaras. Los monitores frente al director le muestran lo que cada una de las
cámaras tiene en imagen y, puesto que para cada momento particular de la
historia se selecciona el punto de vista de una u otra cámara, la imagen
elegida se duplica en una pantalla master para que el director pueda
comprobar que el encuadre de la imagen y el movimiento de los actores que se
está grabando en la cinta master es exactamente el que él quería.
Sentado junto al director está el «director técnico»
(que es quien aprieta físicamente los botones que cortan de una cámara a
otra para conectar la imagen de la cámara seleccionada al grabador de
vídeo). En una producción dramática el realizador trabaja un el guión de
rodaje que el director ha preparado de antemano. Este guión detalla qué
cámara debe cubrir la acción en cada escena, en qué personajes debe
centrarse dicha cámara, si se trata de un «primer plano» (PP), «plano de
pareja» (2-P), un «plano de grupo» (P-grupo) o lo que sea que el director
quiera, y, por último, ese guión también prescribe el punto exacto en que el
director técnico debe pasar de una cámara a otra.
Junto a ellos, en la sala de control, se encuentra el
productor y al «asistente del director» (AD), y en una habitación adjunta
están el técnico de sonido, el técnico de iluminación y el operador del
telecine.
Menos obvio, pero no menos importante para la
producción, es el personal tras la cámara: director de casting, supervisor
de guardarropía, sastres y modistas, supervisor de maquillaje y
maquilladores, diseñadores de escenarios, artistas escénicos, artistas
gráficos, carpinteros y constructores de escenarios, sólo por nombrar unos
cuantos. En los créditos al final de cualquier gran producción dramática se
puede apreciar cuántas personas trabajan para realizar un solo programa.
(Martínez-Salanova 2002)
Los efectos especiales pueden hacerse de muchas
formas. En el cine antiguo se las ingeniaban con creatividad y muy pocos
medios para trucarlo todo. Es clásica aquella escena en que Charlot hacía
una pared con ladrillos que le tiraban desde el piso de abajo y que él
recogía. La escena estaba filmada al revés, es decir, él era el que tiraba
los ladrillos. Esto se puede realizar con imaginación, por ejemplo el que
sale de una piscina dando un salto y totalmente seco.
La nueva tecnología permite emplear infinidad de
trucos o efectos propios de la digitalización. Hay programas especiales para
que en el ordenador se puedan realizar ya todas las operaciones necesarias,
fundidos, encadenados, cortinillas, cambiar toda la gama de colores,
mezclado de imágenes, rotulación y títulos, etc. Se pueden lograr efectos de
superposición sobre cualquier otro fondo o filmación.
Hay muchos tipos de efectos, los de escenografía, los
de cámara, y los que se realizan en el laboratorio.
Entre los de escenografía, fueron siempre muy comunes
los decorados pintados en tela o en mural (forillo), que sirven de fondo a
los actores, participantes en concurso, presentadores, etc; a veces el fondo
se logra proyectando una película o transparencia sobre una pantalla y
teniendo a los actores delante; las maquetas, (hechas a escala, tanto
edificios como verdaderos paisajes, grandes cordilleras, vehículos, naves
espaciales..., casi siempre en tamaño reducido, a veces muy reducido con los
más variados materiales); Los espejos y cristales han sido, y siguen siendo,
muy utilizados en los efectos, ya sea para la combinación y multiplicación
de imágenes. Una correa sinfín da también la sensación de que los actores o
vehículos, quietos, andan delante de un decorado que se mueve... Es un truco
muy utilizado en el teatro, en el cine y en la televisión.
Entre los efectos que se utilizan con la misma cámara
están lo que se hace con la velocidad de ésta, ralentizando, deteniendo la
imagen, o dándole velocidad. Lo que fue tan complicado en el cine, rodando a
más de 24 imágenes por segundo (rallenti o cámara lenta) para conseguir unos
movimientos más lentos cuando se proyecta, o cuando se rueda a menos de 24
fotogramas por segundo (cámara acelerada), que se consigue al proyectarlo el
efecto de aceleración.
Con la cámara se puede también hacer desaparecer
súbitamente personas u objetos (efecto de sustitución), en el que tras
rodar, se detiene el rodaje para quitar o poner un objeto o persona, y se
continúa rodando. Con la cámaras digitales se pueden realizar, en fin
multitud de efectos que tienen que ver con la transición de la imagen
(cortinillas y fundidos) las sombras, la iluminación, los efectos
atmosféricos, las distorsiones de imagen, al igual que en fotografía con
filtros diferentes, prismas, etc.
En el momento del montaje, si se filma la producción,
o en el de producción y mezcla, cuando se trabaja en directo, se hacen
infinidad de efectos, los de laboratorio, que no necesitan de la complicidad
de actores, ni de otros técnicos y los de mezclado de efectos que se hacen
mientras se desarrollan los acontecimientos.. Las cortinillas, los fundidos
y los encadenados señalan cambios de espacio y tiempo.
Las técnicas de animación se basan todas en la
filmación paso a paso, moviendo el objeto o realizando cambios que permiten
ver en el resultado final un todo continuado. La dificultad mayor en este
trabajo estriba en que no existen en el mercado cámaras no profesionales que
realicen este trabajo, es decir, que filmen fotograma a fotograma o marcando
tiempos. El truco para aficionados es el de filmar, mover el objeto, por
ejemplo un muñeco de plastilina o articulado, y posteriormente copiarlo en
otra cinta en la que se imprime el tiempo y ritmo deseado.
«Archivo» (Fragmentos de película que se pueden
obtener en las bibliotecas de película y que se insertan en la producción,
por ejemplo, imágenes de un aeropuerto o de una calle muy concurrida).
«Audiovisual» Película o producciones de vídeo que
incorporan tanto sonido como imagen.
«Director» (La persona que responde ante el productor
de cada obra o episodio individual, dirigiendo a los actores durante los
ensayos, el trabajo del equipo de cámaras, el sonido, la iluminación y a los
demás técnicos del estudio).
«Productor» (El administrador a cargo de toda la
producción de un grupo de programas, por ejemplo un serial, una serie, o la
transmisión regular de un deporte).
«Telecine» Frecuentemente abreviado como «TIC» y a
veces «T/K». (Película o escenas grabadas para una obra rodadas con
anterioridad a la producción en el estudio. Frecuentemente se trata de
exteriores).
«Teleplay» (Una obra de teatro escrita especialmente
para la televisión).
«Televisión corporativa» (Programas hechos para
marketing, promoción, campañas de imagen o por intereses educativos,
sociales, políticos u otros).
"FX" (Efectos de sonido).
"CAMS" (Cámaras).
"ACCIÓN" (En el guión de rodaje abarca las palabras de
los personajes y sus movimientos en el escenario).
"SOF" (Sonido sobre película).
"MIC. ESTÁnCO" y ,illRAFA" (Micrófonos).
"FUNDIDO A" (La escena aparece gradualmente de la
oscuridad).
"FUNDIDO A NEGRO" (La escena desaparece).
"MIX" (El cambio gradual de una escena a otra).
"PML" (Plano medio largo. Este plano incluye la figura
completa del actor, con unos cuantos centímetros de terreno frente a él y
unos cuantos centímetros sobre su cabeza).
"TRACK" (Mover la cámara hacia delante o hacia atrás o
de modo horizontal).
"PM" (Plano medio. Corta al personaje a la altura de
las rodillas).
"PAN" (Mover la cámara en horizontal).
"2-P,, (Plano de pareja, que cubre a dos personajes).
"3-P, (Plano que cubre a tres personajes). |